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Chile rayado


 

       Es muy triste e indignante que nuestro bello país esté todo rayado en construcciones como monumentos, iglesias, edificios destruidos por lo mismo. No me refiero a los murales artísticos estéticos. Nada que ver. Sino los rayados, grafittis sin sentido como también insultos, símbolos vulgares y consignas políticas de ciertos grupos. Cuya destrucción se ha acrecentado desde el estallido delictual nacional de 2019. Es muy triste y desolador ver edificaciones de variado tipo así como monumentos rayados y feos. Eso, sin contar con la destrucción de estructuras públicas varias como adoquines, luminarias, semáforos, señaléticas, etc.

      Es un grave problema cultural y mental de quienes provocan estas acciones. Es cierto que todos sentimos algún tipo de disconformidad o insatisfacción social o no guste algún monumento. Pero eso no da el derecho de destruir y rayar el entorno. La ciudad entera. No tienen conciencia de estética, limpieza, ni arte, ni nada! Aparte de ensuciar y afear las ciudades, nos deja mala reputación como país ante los turistas extranjeros y los turistas nacionales. Pocos poblados (si es que hay) están libre de este tipo de "expresiones" destructivas. 
 
    Cuando veo reportajes de otros países, aun con construcciones medievales o ruinas antiguas, no tienen ninguna raya ni escrito obsceno, ni nada! Y aquí no valoran iglesias, ni muros de tiendas, viviendas, etc. Es realmente vergonzoso y carente de todo raciocinio. Salvajismo puro.

   Parte del desarrollo de nuestro país, involucra el cuidado y preservación de nuestro entorno: Que no hayan rayados, basura, destrucción... Estamos al debe con eso. Cabe recalcar, que se gastan millones de pesos en limpiar y quitar esos rayados, además de repintar. Para que luego unos descerebrados vuelvan a rayarlo. 
   
      Debiese haber sanciones más severas para quienes cometen estas aberraciones. Aunque es muchas veces difícil detectarlos, pues se esconden tras una capucha o máscara sin revelar sus rostros. O rayan a altas horas de la noche, sin ser vistos.

     Muy mal que destruyan ciudades y servicios que nos sirven a todos. Y de paso, se atiendan con un psiquiatra.