Siempre se ha mencionado a los adultos mayores como el arquetipo de sabiduría, experiencia, madurez, quienes inspiran respeto. Hoy en 2023, es triste constatar por ejemplo en Chile, la juventud, sobre todo estudiantes, tienen cero respeto y educación al no cederles el asiento en el transporte público (microbuses). Es horrible observar la indiferencia de esta generación hacia ellos. No sé! No atinan a pensar que ellos por su condición física necesitan más el asiento que ellos.
En mi caso, siempre he dado el asiento a una persona mayor, porque me inculcaron el respeto a mis padres (que también son adultos mayores ya) como a los demás.
Además, las situaciones de abandono, olvido y maltrato que sufren muchos adultos mayores en su propio hogar, hospitales y asilos. Sean por familiares o extraños. Es así, en Chile y en el resto del mundo.
En la antigua generación, los adultos mayores eran sagrados. Quienes eran los principales baluartes de la familia, cuyos consejos y guía eran escuchados y obedecidos. Eran personas que inspiraban respeto, valía y una autoridad dentro del clan familiar y la sociedad. Lo cual esto se ha perdido significativamente, y los ancianos ahora son abandonados, relegados al último lugar en la sociedad y la familia. En muchos casos tristemente, son maltratados y denigrados.
Se nos inculcaba a respetar a las personas mayores con actos de cortesía, conducta y en expresiones para dirigirse a ellos. Me entristece y me enoja la generación actual indiferente y maleducada que tenemos. Que piensan que no llegarán a la vejez.
Es horrible el menosprecio a los adultos mayores considerándolos como personas sin importancia y desechables.
Esto es un reflejo de cómo los padres están criando y educando a la generación actual. Generación que exige, vocifera solamente derechos por doquier, mas nada de deberes. Uno de los miles de deberes que existen, es respetar a los adultos mayores. Así como a los padres.
Es evidente que la generación de adultos mayores de este siglo ya está desapareciendo. Junto con ello, se va el tremendo legado de experiencia, sabiduría, secretos, medicina, cultura, artes, dado por los ancestros. Una generación de hierro que ha resistido guerras, hambrunas, pandemias, vida sacrificada (sin comodidades que existen ahora).
Pienso que ellos merecen todo nuestro respeto y reverencia.
Espero la juventud reflexione, reaccione y piensen que en varios años más, también probablemente llegarán a la vejez. Pues la juventud pasa muy rápido. Pues no les gustaría recibir el desprecio de los demás en la vejez, así como ellos lo ocasionaron a otros adultos mayores.
Es cierto que se ha ido integrando paulatinamente a los adultos mayores en clubes y actividades para su edad. Sin embargo, aún muchos están abandonados y con necesidades.
Hago un llamado de atención a esos hijos que tienen abandonados a sus padres o abuelos en un asilo: no basta llevar cosas materiales para ellos. Ellos necesitan un abrazo, un beso, tomarles la mano, acompañarlos, decir "te quiero mamá /papá". O "te quiero abuelo/abuela"... Porque cuando se van, esos gestos no se podrán tener más. Demostrarles amor cuando están vivos. No sirve de nada demostrarlo después de fallecidos.
Los adultos mayores necesitan y deben ser honrados también, porque por ellos existieron nuestros padres y luego, nosotros.
Respetemos a este grupo etáreo que tanto ha aportado a la sociedad, cuya historia ya desaparece tras la muerte.
